La pequeña población de Villajoyosa es una de las perlas escondidas de la alicantina Costa Blanca. Otro ejemplo de antigua villa pesquera que, con el paso del tiempo y el auge del turismo en España, se convierte en un importante núcleo turístico, pero siempre salvando las distancias con su vecina Benidorm. Y es que este municipio de poco más de 35.000 habitantes sigue manteniendo el encanto de los acogedores pueblos levantinos, habitados por gente humilde y hospitalaria que siguen llevando una sencilla forma de vida. Durante los meses de verano, el panorama cambia levemente, pero la esencia del lugar se mantiene. Para que descubras sus playas, museos, gastronomía y fiestas populares, te voy a dejar esta útil guía con las mejores cosas que ver en Villajoyosa.
Pero antes de nada, vamos con un poco de logística e información útil.
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Cómo llegar a Villajoyosa
Villajoyosa se encuentra unos 33 km al norte de Alicante. Desde la capital de la provincia, puedes elegir dos rutas para llegar a Villajoyosa: seguir la AP-7 o tomar la antigua carretera nacional levantina, la N-332.
En cualquier caso, el tiempo de viaje en ambas opciones es bastante similar durante gran parte del año, rondando los 30-35 minutos. Sin embargo, durante los meses de verano, y durante las vacaciones de Semana Santa, puedes encontrar algunos puntos de tráfico congestionado y lento en la N-332.
Cuál es la mejor época para visitar Villajoyosa
En mi opinión, como alicantino de toda la vida que soy, te diría que el mejor momento para disfrutar de las mejores cosas que ver en Villajoyosa es en los meses de mayo, junio, finales de septiembre, y octubre.
Aquí tenemos la fortuna de contar con una especie de microclima que nos da sol y buenas temperaturas casi todo el año, por lo que es mejor evitar las aglomeraciones y el calor extremo veraniegos.
Mejores lugares que ver en Villajoyosa
Y ahora que ya sabes cómo llegar y cuándo visitar el lugar, vamos de lleno con las mejores cosas que ver y hacer en Villajoyosa.
1. Las casas de colores
No hay estampa más icónica que ver en Villajoyosa que las casas de colores que se encuentran en el bello paseo marítimo de la población. Estas construcciones bajas le dan un toque de alegría inconfundible a Villajoyosa.
Mucha gente se pregunta el porqué de tal contraste con el resto de construcciones urbana del pueblo y, según te cuentan los más viejos del lugar, esa elección de colores deriva de los tiempos en los que centenares de pescadores regresaban al puerto después de una dura jornada de faena. Al otear el horizonte desde las proas de sus embarcaciones, enseguida reconocían su casa por el llamativo tono de la fachada.
Algunas de estas casas – sin duda, las más fotografiadas en Villajoyosa – parecen escalar la suave pendiente y se encaraman a las antiguas murallas de la ciudad, creando una imagen de lo más pintoresca.
2. Museo del Chocolate Valor
Creo que no me equivoco al decir que uno de los productos elaborados en Villajoyosa más reconocido a nivel nacional es el chocolate Valor. En mi casa, al menos, siempre hay disponible una tableta de chocolate Valor puro con almendras. Realmente, no hay otro mejor :).
Por ello, una de las mejores cosas que hacer en Villajoyosa es visitar el Museo del Chocolate. Este museo fue creado en 1998, en la que fuera la pequeña fábrica familiar en la que comenzaron a elaborarse estos magníficos chocolates alicantinos. Ya en 2008, la Generalitat Valenciana reconoció al Museo del Chocolate Valor como el Museo Valenciano del Chocolate, por lo que no encontrarás una institución más sabia en chocolate que esta en tierras levantinas.
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Se trata de una actividad muy interesante para toda la familia, en la que podrás aprender sobre la historia del cacao y los diferentes procesos de elaboración del chocolate en sus distintas formas y variedades. Maquinaria, las características de los cultivos de cacao, productos finales…Y, por supuesto, tendrás que probar el riquísimo chocolate.
Dónde dormir en Villajoyosa
Si estás planeando una escapada romántica en Villajoyosa, te recomiendo que te alojes en el: el Hotel Servigroup Montiboli. Este 5 estrellas se encuentra sobre un acantilado y tiene acceso directo a la playa del Esparrelló. Las vistas son increíbles y ofrece 2 piscinas al aire libre. Si no te acaba de convencer, podrás reservar cualquier otro lugar donde dormir en Villajoyosa aquí y con buenos descuentos:
3. La playa de Villajoyosa
Otra de las mejores cosas que hacer en Villajoyosa es acercarte a su playa. Aunque te parezca raro, incluso en verano puedes encontrar un lugar para colocar tu toalla sin necesidad de pasar la noche anterior haciendo guardia. Se trata de una playa de arena clara, de un kilómetro de largo, con escaso oleaje y que ofrece todos los servicios posibles, siendo una opción genial para todo tipo de público, incluyendo a familias con niños pequeños.
Si preguntas a cualquier paisano de cierta edad, te dirá que recuerda cuando esa playa era de piedrecitas, unos 20 años atrás. Quizás tuviera más encanto entonces, pero hay que reconocer que la arena es más cómoda.
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De todas maneras, si quieres visitar otras playas más vírgenes, podrás elegir entre las nueve que hay en el término municipal. Mi favorita es la del Racó del Conill.
4. Playa del Racó del Conill

La preciosa playa del Racó del Conill es, sin lugar a dudas, uno de los mejores lugares que ver en Villajoyosa. La he visitado en decenas de ocasiones, y siempre lo hice tomando el sendero que parte de la playa de El Torres y bordea los acantilados, durante unos 40 minutos, hasta llegar a El Conill. El camino merece tanto la pena como la cala en sí.
Las aguas del Conill y todas las pequeñas calas – algo más inaccesibles – de alrededor son preciosas, con alternancia de tonalidades turquesas y verdes. Son lugares ideales para bucear y admirar la abundante vida submarina que se mueve entre las rocas y los fondos arenosos.
Puedes pasar el día allí – aunque tendrás que llevarte de todo, porque no hay servicios -, disfrutando de la naturaleza y de la vida. También se puede llegar al Conill por carretera y puedes practicar el nudismo sin que nadie te moleste. Si vas a visitarla en verano, te aconsejo que madrugues pues es realmente pequeña y te quedarás sin sitio pronto.
Para completar el día, te recomiendo que continúes el sendero que lleva a la Torre del Aguiló, una antigua torre vigía desde la que se obtienen unas maravillosas vistas de la bahía de Benidorm.
5. Moros y Cristianos
Acudir a sus fiestas por excelencia es otra de las mejores cosas que hacer en Villajoyosa.
La fiesta de Moros y Cristianos de Villajoyosa tiene lugar a finales de julio y revive uno de los episodios más históricos de la villa, cuando su población logró repeler un ataque de piratas bereberes procedentes del norte de África en 1538. La leyenda cuenta que la victoria se produjo gracias a la intervención de Santa Marta. Las fiestas duran una semana y es increíble ver cómo se involucra toda la ciudad en ella. Los desfiles, la representación de la invasión y la calidad de los trajes que visten los participantes son increíbles. Un ambiente de jolgorio, celebración y felicidad que merece la pena vivir.
6. Gastronomía de Villajoyosa
Como no solo de chocolate vive el hombre, debo decirte que en Villajoyosa podrás disfrutar de una gastronomía variada y sabrosísima. En sus restaurantes y bares podrás degustar suculentas viandas entre las que destacan los pescados y mariscos salidos directamente de su lonja del pescado – uno de los lugares más interesantes que ver en Villajoyosa, sobre todo en el momento de la subasta -, así como los fantásticos arroces, una marca distintiva de muchas de las localidades de la Costa Blanca alicantina.
7. Museo de Villajoyosa
Si te gusta la Historia, debes saber que hay un buen museo que ver en Villajoyosa. Puede ser humilde, pero en las salas de exhibición del Museo de Villajoyosa encontrarás tesoros como hermosas joyas de oro de la época fenicia, frascos egipcios, mosaicos romanos, todos desenterrados en excavaciones en la ciudad y que suponen una clara evidencia de la rica historia de La Vila a lo largo de miles de años.
Sin embargo, quizás la más intrigante historia arqueológica de Villajoyosa sea la del Bou Ferrer, un pecio romano que naufragó en las aguas de Villajoyosa a mediados del siglo I d.C. El naufragio es uno de los más importantes del Mediterráneo y el cargamento del barco está siendo preservado en el museo de la ciudad.