No hay nada como viajar a las localizaciones de Star Wars para intentar esquivar la morriña que nos deja el final de la saga.
Pues sí, todo lo bueno se acaba, y los fans de la saga cinematográfica más famosa de todos los tiempos, Star Wars, nos tenemos que despedir de unas películas que nos han acompañado durante más de 40 años. En mi caso, toda la vida. Es ley de vida, pero tengo que reconocer que me ha dado mucha pena. Decir adiós a Han Solo ya fue duro, pero ahora se marchan de la gran pantalla todos esos personajes e historias que me hicieron soñar durante tantos años.
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Dejemos aclarado, eso sí, que soy de los que siempre preferirán aquellas películas de finales de los 70 y principios de los 80, concebidas por el genial George Lucas y que, con la tecnología de la época, a día de hoy me siguen pareciendo sublimes.
Después llegó Disney, puso miles de millones de dólares sobre la mesa y compró una franquicia que rentabilizará antes de lo que todos pensamos (si no lo ha hecho ya). De esas «nuevas» películas, ha habido de todo, pero, en mi opinión, más oscuros que claros. Una mayor dulcificación de todo (muy Disney) y un masivo empleo de los efectos especiales (algo que no es necesariamente negativo). Eso sí, había que verlas.
Esperaré a que pase la fiebre inicial para ir al cine a ver el Episodio IX, pero, por ahora, os invito a viajar a algunos de los mejores lugares que han tenido el privilegio de representar al mundo de Star Wars en nuestra, en comparación, aburrida Tierra.
Aquí os dejo algunas de las localizaciones de Star Wars más espectaculares:
Índice de contenidos
1. Skellig Michael, Irlanda
El bueno de Luke Skywalker no podía haber elegido un lugar más tranquilo, bello y remoto para su retiro que la isla de Skellig Michael, en Irlanda, cuyo nombre procede del gaélico y significa «La Roca de San Miguel».
Situada a 15 km de la península de Iveragh, en el condado irlandés de Kerry, esta isla rocosa se eleva unos 220 metros sobre el mar, como un gigante pétreo cuyo cuerpo lo componen acantilados cubierto de verde. El paisaje es realmente espectacular y dramático, pero, además, la pequeña isla cuenta con un monasterio paleocristiano del siglo VI, que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Skellig Michael salió en la gran pantalla durante los episodios VII y VIII de la saga. En el VII, tan solo al final, cuando Rey da con el escondite de Luke Skywalker. En el VIII tiene más protagonismo, ya que es donde Rey realiza su entrenamiento Jedi con Luke.
2. Plaza de España, Sevilla, España
Sevilla es una ciudad que, durante los últimos años, ha sido bendecida con grabaciones de películas y series de gran peso. No hay que olvidar que aquí se han rodado muchas escenas de la mítica serie de HBO ‘Juego de Tronos’.
En la saga de Star Wars, aquí se grabaron escenas del Episodio II. Representaba a uno de los palacios del planeta Naboo, y Anakin Skywalker y la princesa Patme (quienes serían los padres de Luke y Leia Skywalker) dan por aquí un paseo mientras tratan importantes temas.
Esta plaza sevillana – una de las más grandes y bellas de España – también es protagonista en otras películas importantes, como ‘Lawrence de Arabia’ (1962) y ‘El Viento y el León’ (1975).
3. Tikal, Guatemala
Hace unos años, realicé un fascinante viaje de 15 días por Guatemala. Descubrí un país del que sabía bien poco y que me sorprendió muy positivamente. Uno de los lugares que visité allí, me gustó por encima de todos los demás: Tikal.
Las ruinas de la antigua y poderosa ciudad maya, aparecen esplendorosas entre la selva tropical guatemalteca. Enormes pirámides, antiguas viviendas, templos, canchas del ancestral juego de pelota maya, anchas vías peatonales… Un lugar mágico y misterioso, que no se sabe cómo llegó a quedar abandonado.
En el episodio IV, aquí se encuentra la base rebelde del planeta Yavin.
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4. Salar de Uyuni, Bolivia
Salar de Uyuni, Bolivia © ViajablogDurante mi viaje por el mundo en los años 2003 y 2004, visité el espectacular salar de Uyuni. Aún recuerdo la primera impresión que me produjo ese vasto desierto de sal que parecía no tener fin. Me sentí pequeño y libre a la vez. Aquí, la Madre Naturaleza es quien domina todo y el hombre apenas puede pasar de puntillas, en sus 4×4, por una meseta hecha de sal.
También recuerdo que aquí vi los cielos nocturnos más bellos que he podido admirar en mi vida. Salimos a la fría y clara noche tapados con mantas y abrigos y nos quedamos un par de horas sin poder quitar la mirada del firmamento. Una estampa que no olvidaré jamás.
En el salar de Uyuni se grabó la batalla de Crait del Episodio VIII, aquella que comienza con el inolvidable truco Jedi de Luke Skywalker frente a un temible ejército de AT-AT (Transporte Acorazado Todo Terreno).
5. Túnez
En Túnez puedes encontrar varias localizaciones de Star Wars: Chott el Djerid, La Grand Dune (cerca de Nefta), Matmata, Ksar Ouled Soltane, Ksar Hadada (Ghoumrassen), Onk Jemal (Tozeur), Sidi Jemour y Ajim (isla de Djerba), Shubiel Gorge y Sidi Bouhlel (cerca de Tozeur).
Los desiertos de Túnez le parecieron perfectos a George Lucas para representar el planeta de Tatooine. Aquí se crió Luke Skywalker y es un escenario protagonista de los episodios I, II y IV.
Si quieres vivir la aventura tunecina galáctica de cerca, te aconsejamos que te empapes bien del viaje de 3 semanas por Túnez que os contamos en Viajablog. Lo realizó Quique y fue una pasada.
6. Glaciar Hardangerjøkulen, Noruega
Otro de los planetas, y momentos, más carismáticos de la saga de Star Wars es el de Hoth, más conocido como «El Planeta Helado». En el glaciar Hardangerjøkulen de Noruega se filmó la espectacular batalla del comienzo del Episodio V: ‘El Imperio Contraataca’.
Fue la primera vez que aparecieron los temibles AT-AT en escena y casi la primera batalla terrestre a gran escala que pudimos ver en la saga. Teniendo en cuenta los efectos especiales que estaban al alcance de los directores y técnicos de principios de los 80, la batalla de Hoth es un auténtico hito del cine.
7. Wadi Rum, Jordania
Y volvemos a una localización de Star Wars en el desierto, en esta ocasión en Jordania. En el desierto de Wadi Rum se grabaron escenas de exteriores del planeta Jedha, una de las localizaciones de Star Wars: Rogue One.
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En este lugar se grabó, también, gran parte de la película ‘The Martian’ (‘Marte’, en español), el éxito que tuvo a Matt Damon de protagonista.