Ser uno de los pueblos más bonitos de España no es algo sencillo. Y es que en nuestro país tenemos la fortuna de contar con unos pueblos con espectaculares atractivos tanto paisajísticos como arquitectónicos e históricos. Así, tenemos pueblos costeros, medievales, de interior, de montaña, con castillo, etc. Personalmente, los que mejor conozco son los pueblos de la Comunidad Valenciana, pero también he hecho mis pinitos por Asturias, Andalucía, y otras regiones de la península y las islas.
Siempre dije que prefiero los pequeños pueblos a las grandes ciudades, así que me alegro de que en 2011 se creará la asociación de «Los Pueblos más Bonitos de España» con la intención de difundir, promocionar, fomentar y preservar el patrimonio natural, cultural y rural en áreas geográficas españolas con menor nivel de población e industrialización.
Desde entonces, la fama de la asociación ha ido creciendo exponencialmente y cada vez son más los pueblos interesados en formar parte de ella, lo cual suele traducirse en un impulso turístico considerable, algo que tiene doble valor en los nefastos momentos que nos está tocando vivir. Pero para entrar en la lista, las localidades son calificadas en base a más de 40 criterios, como el cuidado del patrimonio, la armonía del municipio, limpieza, circulación de vehículos, cuidado de zonas verdes, actividad cultural programada o el respeto de las tradiciones, entre otros.
Hace unos días, se comunicó la entrada de 11 pueblos nuevos en este listado, pasando a tener la red un total de 104 localidades. El acto oficial se realizará en la próxima feria internacional de turismo en Madrid (FITUR), pero os adelantamos cuáles son, para que podáis visitarlos en cuanto la situación mejore.
Índice de contenidos
1. Beget, Girona
La magnífica iglesia románica de Sant Cristòfol de Beget es el epicentro de un pueblo de Girona en el que hay censados poco más de 20 personas. El encanto de Beget reside en el templo y el aspecto medieval de las calles y casas de piedra que le rodean. Además, de aquí parten muchas rutas senderistas – y de bici de montañas – aptas para todos los públicos y el paisaje es realmente de cuento.
2. Molinaseca, León
A pocos kilómetros de Ponferrada un antiguo puente romano hace detenerse la mirada de los viajeros. Es la entrada a Molinaseca, un pueblo de corte medieval que es también conocido por su magnífica gastronomía y un santuario de las Angustias (siglo XVIII) que fue fundado sobre los restos de una iglesia del siglo XI.
3. Baños de la Encina, Jaén
El castillo de Burgalimar – una fortaleza omeya construida sobre el siglo X, y considerada como uno de los castillos más antiguos de Europa – es el icono de este precioso pueblo de la provincia de Jaén. Junto a él hay antiguas ermitas, palacios y casas de fachadas blancas rodeadas de los típicos campos de olivos jienenses. Un lugar perfecto para descansar y disfrutar de la historia y la gastronomía.
4. Nuevo Baztán, Madrid
El pueblo de Nuevo Baztán es relativamente «reciente», pues fue fundado en el siglo XVIII como un lugar donde se producían tejidos y vidrios, además de cuidar de la labor agrícola. Declarado Monumento Histórico Artístico en 1941, aquí puedes admirar palacios barrocos, bellas plazas y el icónico Palacio-iglesia de Goyeneche (fundador de Nuevo Baztán). Tampoco te pierdas las carnes asadas que encontrarás en sus restaurantes.
5. Agulo, La Gomera
La bella y natural isla de La Gomera esconde secretos tan agradables y coloridos como Agulo, el cual se asoma a las aguas del Atlántico y regala una bella panorámica de Tenerife. Tiene cierto aire colonial con ermitas e iglesias antiguas.
La capital del Valle del Roncal se extiende por ambas orillas del río Esca. A sus casas de piedra – entre las cuales se encuentran varias casas señoriales – hay que añadirla la extrema belleza natural de los parajes que las rodean.
7. Cudillero, Asturias
La pesquera villa de Cudillero ha sido uno de los lugares que más boom turístico ha experimentado este verano. Y doy fe de ello, pues fui a finales de agosto y tan solo saqué una foto desde el aparcamiento del puerto porque apenas se podía andar por sus calles. Os recomiendo que viajéis a él fuera de temporada, para así poder disfrutar de esta pequeña localidad asturiana de calles empinadas a las que se asoman coloridas casas, bares, tiendecitas y una pequeña playa y puerto cuyas fisionomías varían al son de la marea.
8. Bulnes, Asturias
También en Asturias se halla el pequeño pueblo de Bulnes, famoso por la cercana montaña del Naranjo de Bulnes (Pico Urriellu). Este pueblo de los Picos de Europa apenas cuenta con 35 habitantes y cuenta con casas de piedra y tejados de arcilla roja. Es una visita imprescindible para los amantes de la naturaleza que anden por Asturias.
9. Garachico, Tenerife
La localidad de Garachico me pareció tranquila e ideal para aquellos que busquen el reposo cerca del mar y la naturaleza. Destruida por una erupción volcánica a principios del siglo XVIII, hoy sigue mostrando su aire colonial isleño. Báñate en sus piscinas naturales mientras disfrutas de la sabrosa gastronomía canaria. Es una base ideal para explorar el bello norte de la isla de Tenerife.
10. Valverde de la Vera, Cáceres
Valverde de la Vera sustituirá a Trujillo en la lista de los «Pueblos más Bonitos de España», al perder este puntos en los criterios necesarios. En este pueblo podrás ver los restos de su antiguo castillo, iglesias y una bella plaza mayor tradicional extremeña. Además, por sus calles empedradas verás fluir el agua que se distribuye del riego de las huertas por esas «regateras».
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11. Genalguacil, Málaga
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Adherido a una ladera del valle del Genal, Genalguacil es el clásico ejemplo de pueblo andaluz con casas de fachadas encaladas. Lo que más llama la atención – además de sus bellos paisajes – son las más de 120 obras de arte contemporáneo que decoran las estrechas y sinuosas calles del pueblo.