
No se si existe una versión del “Síndrome de Stendhal” que se pueda aplicar a lo que te encuentras al visitar Quito. Más de 4.000 inmuebles declarados “Patrimonio”, incluyendo 10 museos, 22 templos y varios conventos, en un área de menos de 4 Km2 son para producirle una sensación de vértigo al viajero más curtido.
A mí, desde luego, el primer día que recorrí Quito me lo produjo. A la ONU, desde luego, también, o no lo hubiera declarado primer “Patrimonio Cultural de la Humanidad” hace ya 37 años y simultáneamente con Cracovia. Para no perder tu valioso tiempo en Ecuador, en este artículo encontrarás una somera guía de las principales atracciones en el Centro Histórico de Quito.
Las cifras del primer párrafo no deben asustarte, lo más importante se recorre fácilmente a pie y no hay más de 200 metros entre una visita de interés y la más alejada. La única de las visitas recomendadas en el centro de Quito que se encuentra un poco más lejos del mismo es la Basílica del Voto Nacional. A unas siete cuadras de la Plaza de la Independencia (donde cada lunes se realiza la ceremonia del Cambio de Guardia Presidencial), sólo has de prepararte mentalmente para, hacia la mitad del camino, la cuesta arriba que te espera antes de llegar a su lado.
Índice de contenidos
La Calle de la Ronda

Dicen de la Ronda (o Calle Juan de Dios Moreno, el nombre con el que aparece oficialmente en el callejero de la capital de Ecuador) que es una de las calles más antiguas de Quito. Como tal, ha pasado por distintas etapas, que incluyen un pasado bohemio hace cien años y una degradación paulatina más tarde.
Recuperada la calle y su entorno, puedes encontrar artesanos tradicionales en la Ronda, que instalaron talleres y tiendas, gracias a las facilidades de la municipalidad. Repujado en metales, trabajos en madera o hierro son algunos de los campos en los que verás trabajar, pues están abiertos al público, a esos herederos de oficios tradicionales.

Por la Ronda se pasea mucho y suena la música en directo de varios establecimientos, así que si vas a dormir en esa calle o cerca, no dejes de llevarte en el equipaje unos tapones para los oídos. Creedme, se de lo que hablo.
Si te apetece comer o cenar algo en la Ronda, hay varios lugares como el Pondo de Barro (entre Guayaquil y Venezuela) ofrecen platos sencillos como Empanadas de Morocho (1,75 USD), Mote con Chicharrón (4,75 USD) o Seco de Pollo (5 USD) en un patio abierto. Si, con música en directo.
Dentro de la página web oficial de Quito Turismo, este es el apartado dedicado a información sobre la Calle de la Ronda en el centro histórico de Quito.
La Plaza de San Francisco

La Plaza de San Francisco es sólo uno de los elementos que componen el conjunto que la Orden Franciscana planeó y construyó, al poco de que Pedro Alvarado fundara San Francisco de Quito en 1534.
Los otros dos elementos arquitectónicos principales y públicos son la Iglesia (de entrada gratuita), y el Convento (que alberga un Museo, por lo que los extranjeros adultos pagamos 2 USD por la entrada y los niños sólo 1 USD).
Si los 35 frailes franciscanos me permiten la sugerencia, habilitar una pequeña zona como cafetería sería una buena manera de disfrutar la tranquilidad del patio ajardinado del Convento, con un café o un jugo (zumo) en la mano. Claro que entonces a lo mejor se reduce la tranquilidad. Bueno, sólo era una idea.
No hay necesidad de alejarse de la Plaza de San Francisco para encontrarse con la belleza de la Casa Gangotena. Lo que era una mansión señorial fue convertida en hotel de lujo y se encuentra en una de sus esquinas, a la derecha de la Iglesia según salimos por su puerta.

Aunque no puedo hablar en primera persona de lo que supone alojarse en una de sus 31 habitaciones (me consta, gracias a la amabilidad del personal del hotel, que quien se aloja en la exclusividad de las suites goza de espectaculares vistas desde la terraza), si doy fe de que en su restaurante se come estupendamente su menú almuerzo.
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Si aún te queda tiempo en Ecuador y vas con presupuesto ajustado o lo que buscas es un lugar barato para comer, en el N2-20 de Sebastián de Benalcázar (la calle enfrente de la Iglesia de San Francisco) está el Fray Francisco, un pequeño restaurante (con aspecto de lugar de comida rápida) con Patatas Criollas (3,99 USD), Patacón Pisado (2,75 USD) y Combos desde 2,99 USD.
En la página web oficial del Museo Fray Pedro Gocial podéis encontrar más información sobre el mismo.
La Iglesia de la Compañía de Jesús
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La fachada de La Compañía, como se la conoce más abreviadamente, es una preciosa pero discreta obra realizada en piedra volcánica. Aunque de esa discreción sólo se hace gala en el color, pues la obra es de un barroquismo absolutamente europeo, con abundancia de motivos religiosos y relativos a la orden jesuita.
Es en el interior de la iglesia cuando llega la sorpresa, al constatar que en su interior el más precioso de los metales cubre casi todas las superficies a la vista. Hasta 7 toneladas de pan de oro se reparten como una capa de prestigio por la madera de cedro tallada.
Para apreciar mejor su belleza, recomiendo llegar temprano para hacer la visita con el menor número de gente posible, al menos durante unos minutos, entre nosotros y el Retablo Mayor.

Dentro de la página web oficial de la Fundación Iglesia de la Compañía (a la que agradezco el permiso concedido para tomar fotografías), este es el apartado dedicado a información sobre horarios y precios de la visita a la Iglesia de la Compañía. A fecha de publicación de este post, se puede visitar de lunes a jueves de 9:30 a 18:30, los viernes cierra una hora antes, sábados y festivos abren a la misma hora pero cierran a las 16:15 y los domingos de 12:30 a 16:15. El primer domingo del mes la entrada es libre. El costo para extranjeros es 4 USD y para estudiantes 2 USD.
La Iglesia del Sagrario
Técnicamente debemos echarle la culpa a los sevillanos de que existan iglesias como esta, “pegadas” a otras de mayor categoría. El modelo de la Catedral de Sevilla, que se exportó a las posesiones de Hispanoamérica, constaba de una capilla que funcionaba como sagrario de la catedral adyacente, y ese es el que se repite en este edificio de Quito.
Cuando yo visité la Iglesia del Sagrario de Quito estaban celebrando la misa del domingo, así que no me pareció correcto hacer fotos. Recuerdo que su interior era pequeño, más como una capilla grande que una Iglesia, y estaba bellamente decorado, con frescos en el techo y retablos interiores en los que resplandecía el pan de oro. Sí que me quedó grabada la espectacularidad y el contraste de entrar por una humilde puerta, a un lado de la principal y que al girarse dentro para verla bien, el lado que daba al interior de la iglesia estaba decorado con un barroquismo dorado que dejaba estupefacto.
Hay quien dice que la Iglesia del Sagrario (siglo XVII) tiene mayor encanto que la Catedral de Quito, con la que comparte fachada. Es cierto que a veces un templo puede impresionar más por su recogimiento y otro por su tamaño, pero ¿quién soy yo para juzgar, sin un título bajo el brazo de experto en arquitectura y arte religiosos?
Dentro de la página web oficial de Quito Turismo, este es el apartado dedicado a información sobre la Iglesia del Sagrario y sus alrededores.
La Plaza de la Independencia

La Plaza de la Independencia, Plaza Grande o antigua Plaza Mayor, está flanqueda por edificios que cumplen con los cánones del poder tradicional en la América colonizada por los españoles. Tanto el poder del Rey (la Audiencia) como el de Dios (Catedral) estaban no muy lejos el uno del otro, y con el del pueblo (Palacio Municipal) cerca de ellos.
Curiosamente, primero (en 1562) se comenzó la construcción de la Catedral Metropolitana de Quito – en uno de sus laterales – y después (en 1612) la Plaza se convirtió en el eje central de la vida administrativa en Quito. Ha sido una simple explanada, entorno para una fuente de agua, lugar de mercado y fiestas y nos llega hasta hoy como parque ajardinado de estilo francés.
Buscando el acceso a la Plaza desde la Calle García Moreno, nos encontramos antes con la puerta principal de la Catedral. La que podría ser la catedral más antigua de Sudamérica, no mira hacia la Plaza sino que toda la pared derecha del edificio ocupa por completo un lado de la misma.

Otro lateral, a nuestra izquierda, lo ocupa el Palacio de Carondelet. El antiguo Palacio Real alberga hoy a la Presidencia y Vicepresidencia de Ecuador, y su zona de columnatas de piedra se pueden recorrer libremente, incluso asomarse a los barandas de hierro forjado que dan a la plaza y que proceden del palacio de las Tullerias en Francia.
De su puerta principal, flanqueada siempre por dos soldados con uniforme de época, es de donde salen los Granaderos de Tarqui para realizar la ceremonia del cambio de guardia cada lunes a las once de la mañana.

Bajando a la plaza otra vez, por el lado contrario al que hemos subido, nos encontramos con el bello Palacio Hidalgo, hoy convertido en hotel boutique en la esquina de la Plaza, con privilegiadas vistas a la misma. A su lado hay dos edificios del mismo conjunto, el Palacio de la Curia o Centro Comercial Pasaje Arzobispal (con un patio interior rodeado de comercios, cafés y restaurantes), y el Palacio Arzobispal de Quito.
Este último sigue siendo la residencia oficial del Arzobispo de Quito pero es posible acceder a su patio, despacho y oficinas. El patio del palacio presenta un curioso elemento decorativo en su suelo, al carecer de materiales más nobles se usaron huesos de vaca como adorno.

Tranquilo, lector, no desfallezcas que sólo quedan dos cosas más por ver y una recomendación. El último edificio de importancia de la Plaza es el ampulosamente llamado Palacio Municipal (un título de espíritu principesco que no veía en un edificio desde el Ayuntamiento de Ferrol, que tiene esa inscripción en la fachada). La sede del poder ejecutivo de la ciudad de Quito está en un edificio discreto y construido a finales del siglo XX, el más humilde estéticamente de toda la plaza.
En el centro de la plaza está el monumento que le da su nuevo nombre. Los aires de libertad, el grito de libertad, se representan en Quito con el monumento a la Independencia, inaugurado el 10 de Agosto de 1909.

¿Mi sugerencia? Suelo huir de los sitios que tienen en su decorado el cartel azul de “Recomendado por Lonely Planet”, pero en esta ocasión cuando buscaba en la plaza un sitio para tomar algo no me percaté de que allí estaba el maldito hasta después de sentarme y pedir. Pese a ello, bajo el lateral de la Catedral, en el local del número Oe4-17, recomiendo que os pidáis un jugo de mora (1,50 USD) y os sentéis en una de las sólo dos mesas que tienen en el exterior.
Dejad la cámara, dejad la guía de viaje (si la lleváis), y protegidos bajo una sombrilla dedicaos a ver la vida de Quito pasear ante vuestra mirada.
Dentro de la página web oficial de Quito Turismo, este es el apartado dedicado a información sobre la Plaza Grande de Quito y sus alrededores.
La Basílica del Voto Nacional
Volviendo a la Basílica del Voto Nacional o de la Consagración de Jesús, esta se considera inspirada en otras dos grandes obras religiosas, una en Nueva York (la Catedral de San Patricio) y la otra en Paris (ni más ni menos que la Catedral de Notre Dame). Sus dimensiones son ciertamente apabullantes, con una nave central de 140 metros de largo y dos torres frontales que alcanzan los 115 metros de altura.
Y en su altura está uno de los aspectos más interesantes. En el exterior del centro de la cruz que se forma en la nave central, hay una torre a la que se puede acceder para contemplar unas impresionantes vistas del norte de Quito y de las propias torres y el tejado de la catedral.
Si uno no se ve con ánimos de subir tres tramos verticales de escaleras, existe un mirador situado entre las dos torres desde el que contemplar un excelente panorama del centro histórico de Quito. El coste de subir a ambos es de sólo 2 USD y existe la posibilidad de tomar el ascensor hacia el mirador. No lo recomiendo a la hora de bajar, pues se pierde el acceso al coro y a una perspectiva del interior de la catedral desde una buena altura.

Después de tanto caminar, subir y bajar, a lo mejor te mereces una pausa. En el camino de regreso hacia el “centro del centro” (la Plaza de la Independencia) puedes pararte en el Hotel Patio Andaluz (Garcia Moreno N6 52, entre Olmedo y Mejia). En su, si, patio interior está el Restaurante “Rincón de Cantuña” donde puedes tomarte un café o (con platos principales desde los 15 USD) quedarte a comer.
Dentro de la página web oficial de Quito Turismo, este es el apartado dedicado a información y horarios sobre la Basílica del Voto Nacional.
El Centro Histórico de Quito, como has visto, no es Patrimonio Cultural de la Humanidad porque sí. Dentro de una ciudad enorme, como cualquier capital, encontramos un ordenado entramado de calles llenos de iglesias, palacios y edificios monumentales que merecen la pena ser visitados.
En un viaje a Ecuador, Quito es mucho más que la ciudad en la que se aterriza para salir otra vez en dirección a las Islas Galápagos. Quito es monumental y un destino en sí mismo.