La montaña de La Mola se encuentra en el Parque Natural de Sant Llorenç de Munt, en la comarca del Vallès Occidental, a pocos kilómetros de distancia de Barcelona. Se trata de la montaña más alta del parque con una altura de 1104 metros desde cuya posición podremos disfrutar de unas preciosas vistas a Montserrat, el Montseny, el litoral e incluso los Pirineos.
En la misma cima se encuentra el Monasterio de Sant Llorenç de Munt que ofrece servicio de restaurante, una capilla y una sala con exposición de fotografías de época.
La excursión a La Mola es ideal para realizarla en familia ya que se trata de un recorrido sencillo con un desnivel de 444 metros y una distancia que no supera los 6 kilómetros incluyendo la vuelta. La podemos hacer perfectamente con niños y nosotros lo hicimos con tres que iban desde los 5 hasta los 7 años.
Os recomendamos llevar suficiente agua y a ser posible la comida para disfrutar de un buen día en la montaña de picnic sin prisas. Asimismo, en el Monasterio de Sant Llorenç de Munt existe un restaurante que ofrece comidas por reserva. Actualmente, debido a la situación de emergencia COVID-19, el restaurante ofrece únicamente comida para llevar.
El camino clásico de los monjes al Monasterio de Sant Llorenç de Munt
Existen varios caminos que llegan a la Mola. Nosotros os contaremos el clásico y más sencillo que lleva por nombre El Camí dels Monjos: el camino de los monjes. El nombre procede de la ruta habitual que realizaban los monjes para visitar los monasterios de Sant Cugat y el de Sant Llorenç de Munt.
Dejamos aparcados el coche en la calle Vista Alegre donde veréis el Cavall Bernat frente a vosotros, una mole de piedra ideal para escaladores. A partir de ahí nace el camino que nos llevará hasta lo más alto de La Mola. El sendero, aunque no tiene pérdida en absoluto, está señalizado con las marcas rojas y blancas del PR-C 31.
Se trata de una ruta muy frecuentada por lo que os recomendamos salir pronto por la mañana a ser posible. De esta manera no tendréis problemas para aparcar y la hora de sacar los bocadillos o las fiambreras para el picnic será aproximadamente cuando lleguéis a la cima, el mejor lugar para hacerlo gracias a sus vistas y al amplio espacio alrededor del Monasterio de Sant Llorenç de Munt.
El recorrido realiza una subida constante durante el primer centenar de metros y se agradecen las primeras vistas atrás que encontramos sobre las cercanas poblaciones de Terrasa, Sabadell y las montañas más alejadas del Montseny y los Cingles de Bertí. El ascenso se combina mediante sendero y algunas zonas con escaleras labradas sobre la roca del terreno.
Una vez llegamos a Cavall Bernat, una inmensa roca ideal para escaladores, el ascenso se vuelve más paulatino. Si no padecéis de vértigo os aconsejo alejaros ligeramente del camino principal y acercaros a la roca de Cavall Bernat. Una vez en el abismo, os aconsejo que miréis hacia abajo para contemplar la caída vertical.
A pocos metros de aquí y también ligeramente fuera de la ruta del Camí dels Monjos, se encuentra Can Pobla. Se trata de un interesante horno de obra que en la comarca se les conoce como «teuleries». Servía para crear piezas de cerámica y generalmente se construían en medio del bosque para tener el combustible bien a mano.
De vuelta al camino principal, la pista se encarama hacia la cima y empezamos a vislumbrar La Mola y el Monasterio de Sant Llorenç de Munt a nuestra izquierda.
La cima de La Mola y el Monasterio de Sant Llorenç de Munt
La Mola realiza una suave colina en su cima. Sobre ella, destaca el Monasterio de Sant Llorenç de Munt cuyas primeras construcciones se remontan a época del románico del siglo XI aunque prácticamente lo que vemos procede de la reconstrucción que se realizó hace un centenar de años. Aun así, su estilo sigue fiel al edificio original.
Los monjes dejaron de habitar el monasterio a finales del siglo XIX. Actualmente, veréis una capilla en funcionamiento, una sala con exposición de fotografías y un restaurante que realiza platos de gastronomía catalana. Actualmente, por la situación de la pandemia COVID-19 el restaurante solo ofrece comida para llevar.
Alrededor del Monasterio encontraréis un amplio espacio verde donde para y disfrutar de vuestro picnic si habéis traído vuestra comida u os habéis decidido por comprarla en el restaurante.
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Asimismo, encontraréis una mesa de orientación, justo en frente del Monasterio, para reconocer las cimas más importantes de nuestro alrededor: El Montseny, El Montnegre, Els Cingles de Bertí, Montserrat, La Serra d’Ensija y muchos más.
Veréis en la zona más al oeste del Monasterio un grupo de mulas paciendo. Si vais con niños es ideal acercaros a ellas. Su espacio está delimitado por un vallado (no eléctrico), aun así, vigilad la proximidad con las mulas porque una mordida de mula puede ser muy peligrosa además de ser el animal con la mordedura más peligrosa de infección junto con el ser humano.
Estas mulas transportan la comida y demás enseres para el restaurante del Monasterio de Sant Llorenç de Munt.
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La vuelta la realizamos por el mismo camino que hemos realizado para la ascensión.
Datos generales de la excursión a la Mola
- Distancia total: 5,90 kilómetros
- Desnivel acumulado: 444 metros
- Tiempo aproximado (con niños): 3 horas
- Tipo de ruta: Ida y vuelta por el mismo camino.