Notar como las ruedas ya no están en la pista de aterrizaje, mirar por la ventana, ver cómo se aleja el aeropuerto, hacer unas fotos, sobrevolar el mar, ver cómo se acerca el aeropuerto, hacer unas fotos, notar como las ruedas tocan la pista de aterrizaje, llegar al destino. Y todo lo anterior, seguido, en poco más de 90 segundos.
Es la ruta aérea programada (no charter) más corta del mundo. Incluso si le añadimos el tiempo que el avión carretea por la pista, estamos hablando de un viaje de poco más de dos minutos de duración, como podéis ver en el vídeo.
Para disfrutar de este vuelo, que pasa en un abrir y cerrar de ojos, tenemos que desplazarnos al norte de Escocia. Rodeadas por el tempestuoso Mar del Norte se encuentran las Islas Orcadas, con sólo unas 20 de las 70 habitadas y es entre dos de ellas donde se hace este trayecto.
La compañía Loganair vuela los 2,8 km que separan los aeropuertos de Westrey y Papa Westrey, e incidentalmente realiza un record merecedor del Libro Guinness con ese trayecto. Por cierto, si el viento es favorable la duración del vuelo se reduce a menos de un minuto.
Aunque parezca dificil de creer, las Islas Orcadas (Orkney Islands en inglés), que llevan habitadas más de 8500 años, pese a estar en una latitud tan septentrional tienen un clima más suave de lo que podríamos esperar gracias a la Corriente del Golfo.
Eso sí, el día y la noche tienen duraciones extremas en verano e invierno. En el día más largo del verano, el sol sale a las 03:00 y se pone a las 21:29, ¡18 horas y media de luz!. Y si hablamos del invierno, la oscuridad es completa hasta las 09:05 que rompe el día pero apenas unas horas después, a las 15:16, hay que rendirse a la evidencia: menos de 6 horas y media de luz que pasan volando.
Google Maps | Westrey y Papa Westrey
Vía | Finofilipino
