La provincia de Sichuan se encuentra al suroeste de China y su capital es la ciudad de Chengdu. Con una población de aproximadamente 85 millones de habitantes es la cuarta provincia más poblada de China después de Cantón, Henan y Shandong.
Sichuan es conocida por ser una provincia de paisajes montañosos y por sus reservas naturales donde el panda gigante se cría en cautividad. También, es famosa por su gastronomía, que se caracteriza por ser de las más picantes de toda China.
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Hay que destacar que gran parte de Sichuan antiguamente pertenecía a una región del Tíbet y que por eso muchas de las ciudades y pueblos que nos encontramos por esa zona aún conservan sus raíces tibetanas y la arquitectura tibetana original.
Si estás pensando en visitar esta increíble provincia de China que no deja indiferente a nadie, aquí te dejo unos cuantos lugares que deberías apuntar en tu lista. Empecemos:
Índice de contenidos
Parque Nacional Jiuzhaigou
El Parque Nacional de Jiuzhaigou está situado en el valle de Jiuzhai, al norte de Sichuan. Abarca una superficie de 72 mil hectáreas de montañas nevadas de hasta 4500 metros, coloridos bosques, lagos de agua cristalina y grandes cascadas. Fue declarado en 1992 Patrimonio de Humanidad por la Unesco.
Si te gusta estar rodeado de naturaleza es, sin lugar a dudas, uno de los lugares que más merece la pena visitar en Sichuan. Eso sí, si quieres evitar el turismo de masas no es un lugar muy recomendado para ti.
En la actualidad, debido al gran número de turistas, se ha tenido que limitar el número de personas a 2000 diarias, que tampoco son pocas. Por ese motivo, para visitar el Parque Nacional se necesita reservar las entradas con anticipación. La entrada al parque cuesta en temporada alta 220 yuanes (26 euros aprox.) más 90 yuanes (12 euros aprox.) para el autobús turístico, que no es obligatorio pero sí necesario.
Se recomienda ir en otoño un mínimo de dos días. Para llegar a Jiuzhaigou puedes ir desde Chengdu en avión, en autobús o en una minivan compartida.
Leshan: Gran Buda y Monte Emei
En Leshan se encuentra la estatua Buda de piedra más alta del mundo. Está situada en un acantilado frente al Monte Emei, en la confluencia de los ríos Min Jiang, Dadu y Qingyi. La estatua mide 71 metros de alto, tiene una anchura de 28 metros y se esculpió durante 90 años en el periodo de la dinastía Tang (siglo VIII).
El imponente Buda descansa con mirada serena contemplando el devenir del tiempo entre montañas mientras cientos de turistas suben día a día a mostrar sus respetos y a hacerse unos selfies. Dentro del recinto hay varios templos y tumbas que también merecen la pena visitar.
Se puede llegar a Leshan desde Chengdu en dos horas en autobús por 45 yuanes (6 euros aprox.). La entrada para ver el Gran Buda cuesta 90 yuanes (unos 12 euros). Además, si vas bien de tiempo, a tan solo 100 kilómetros del Gran Buda puedes visitar el Monte Emei, una de las cuatro montañas sagradas del budismo. En esta montaña de 3000 metros de alto se encuentra el primer templo budista construido en China en el siglo I.
Seda
Seda es uno de esos lugares que uno sueña en visitar y que cuando llega aún no se acaba de creer que está allí. Situado al noroeste de Sichuan, en la Prefectura Autónoma de Garze, está a una altura de casi 4000 metros sobre el mar.
El lugar es famoso por tener el instituto budista más grande el mundo: el Larung Gar. Este instituto creado en 1980 tiene más de 40 mil estudiantes budistas de todo el mundo. Seda, localizado entre un precioso valle y repleto de pequeñas casas rojas al estilo tibetano, casi se podría decir que es una ciudad solo para budistas.
El problema de ir a Seda son las malas carreteras para llegar hasta allí. Desde Chengdu a Seda puedes ir en autobús. Son 600 kilómetros de distancia y se tarda unas 14 horas en llegar. Además, actualmente, las autoridades chinas han prohibido el acceso a la ciudad a los turistas extranjeros, así que si tienes pensado ir tienes que informarte bien ya que este tipo de restricciones varían cada año.
El lago Xinlu
También en la Prefectura Autónoma de Garze, a 250 kilómetros de Seda y unas 7 horas de viaje, se encuentra el espectacular lago Xinlu.
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El lago está muy cerca de la frontera con el Tíbet, a 3000 metros de altura. Toda esa zona está repleta de montañas nevadas, templos budistas y tiendas de campaña de los nómadas. Es común cruzarse a jinetes vestidos con sus atuendos tibetanos y con machetes colgando de la cintura paseando a sus yaks. No solo parece que estás en otro país, sino también otra época.
El lago Xinlu se encuentra en medio de la nada, rodeado de altas montañas y al fondo se puede ver la cordillera del Himalaya. Por lo alejado que está de todo, es un lugar desolado y sin turismo. Si tienes tienda de campaña puedes quedarte a dormir a orillas del lago, si no puedes bajar hasta la ciudad de Garze que está a unas 2 horas del lago.
Litang
Litang, situado al suroeste de Sichuan, está a 4000 metros de altura sobre el mar lo que la convierte en una de las ciudades más altas del mundo. Lugar del nacimiento de varios Dalai Lama, históricamente es un punto de conflicto entre chinos y tibetanos a causa de las continuas revueltas a favor de la independencia del Tíbet.
La totalidad de Litang conserva la arquitectura tradicional tibetana y esa atmósfera única que solo encuentras en lugares como el Tíbet. No encontrarás muchos turistas por aquí. Tampoco grandes hoteles ni centros comerciales. Como mucho algún restaurante tibetano donde comerte unos momos y tomarte un té con mantequilla como hacen los tibetanos.
En la parte más alta de la ciudad se encuentra un monasterio construido hace ya 400 años donde residen más de 1.000 monjes budistas. Caminando por las calles de Litang y por el templo te cruzas constantemente a aldeanos y monjes dando vueltas a las ruedas de oración mientras rezan para sí mismos.
Es aconsejable visitar Litang el 1 de agosto cuando se realizan las carreras de caballos y uno puede contemplar el Tíbet más tradicional en todo su esplendor. Puedes llegar a Litang en autobús o furgoneta desde Yunnan o bajando por Sichuan. Por donde sea que decidas ir, asegúrate de que el conductor conduce con precaución, las carreteras de tierra repletas de acantilados y rocas que se desprenden de la montaña han hecho que sea una de las rutas más peligrosas del mundo.
Espero que está pequeña guía de Sichuan te sea útil para organizar un buen viaje por Sichuan y para que puedas disfrutar de estos lugares tan especiales. Seguramente te estés preguntando por qué no he mencionado algún centro para ver pandas. Es verdad que muchos centros de conservación y reproducción del panda gigante hacen una increíble labor, sin embargo, muchos de ellos acaban por transformarse en una turistada que prefiero no promocionar.
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Si te ha gustado el artículo puedes visitar mi blog de viajes, Sin Destino Aparente, para seguir conociendo otros lugares de Asia. También, puedes echar un vistazo a la ruta de dos semanas que hice con mis amigos por Sichuan para tener una idea más amplia de lo que es viajar por esta provincia china.